Vamos a desgranar uno por uno los tipos de hachís que hay disponibles a día de hoy y que además puedes comprar en Greenery.
La cultura y el consumo de cannabis han existido durante siglos, y el hachís ha sido una parte integral de esta experiencia. Desde el Hachís Marroquí hasta el Hachís Indio, cada tipo tiene su propia historia y características únicas.
El hachís, también conocido como “hashish”, es una forma concentrada de cannabis. Se produce recolectando y procesando las tricomas resinosas de la planta de cannabis.
Breve introducción al hachís y sus distintas variedades
Historia del Hachís
El hachís ha sido consumido por seres humanos durante siglos y tiene una larga historia que se remonta a varias culturas en diferentes partes del mundo. A continuación, os damos un breve resumen histórico de este derivado del cannabis:
Orígenes antiguos: El consumo de hachís tiene raíces antiguas en culturas de Asia Central, India, y el Medio Oriente. Se cree que su uso se remonta a la antigua Persia y Mesopotamia.
Expansión en Asia: A lo largo de los siglos, el hachís se extendió por Asia, siendo especialmente asociado con las tradiciones espirituales y religiosas en lugares como la India, donde se menciona en textos antiguos como el Atharva Veda.
Viajes a África y Europa: Durante la expansión islámica en el siglo VII, el hachís llegó a África del Norte y eventualmente a Europa. En algunas culturas musulmanas, el hachís fue considerado una sustancia medicinal.
Siglos XIX y XX: Durante la época colonial, el hachís fue llevado a Occidente por exploradores y soldados. A lo largo del siglo XIX, su popularidad creció en ciudades europeas como París y Londres.
Prohibición y estigmatización: A medida que avanzaba el siglo XX, muchos países comenzaron a prohibir el hachís y otras sustancias psicoactivas. La Convención Única de Estupefacientes de 1961, supervisada por las Naciones Unidas, incluyó al hachís en la lista de sustancias controladas.
Cambio en la percepción y legalización: A partir de finales del siglo XX y principios del siglo XXI, ha habido un cambio en la percepción del hachís y la marihuana en general. Algunos lugares han legalizado el uso medicinal y recreativo del cannabis, incluido el hachís, mientras que otros mantienen restricciones.
El hachís ha experimentado un viaje complejo a lo largo de la historia, desde sus raíces en antiguas civilizaciones hasta las cambiantes actitudes y regulaciones modernas en todo el mundo.
Hachís 0.0
El Hachís Doble Cero, también reconocido como hachís de polen, destaca por su elevado contenido de CBD, convirtiéndose en una opción altamente apreciada entre los conocedores. Este tipo de hachís se obtiene mediante la técnica de extracción de tamizado, utilizando flores secas de la más alta calidad. Su proceso de elaboración es completamente natural, sin la intervención de tratamientos químicos o aditivos, garantizando así un producto respetuoso con el medio ambiente y la salud de los consumidores.
El Hachís 0.0 se destaca por su extraordinaria concentración de CBD, haciendo de él una elección predilecta para aquellos que buscan los beneficios terapéuticos del cannabidiol sin experimentar los efectos psicoactivos asociados al THC.
Además de sus propiedades terapéuticas, este hachís ofrece una experiencia sensorial única. Su distintivo sabor y aroma lo han convertido en un favorito indiscutible entre los consumidores de hachís, que buscan disfrutar de cada inhalación.
En resumen, el Hachís Doble Cero se erige como un tesoro cannabinoide, ofreciendo beneficios terapéuticos sin comprometer la claridad mental. No obstante, su estatus legal variable requiere una consideración cuidadosa antes de su adquisición. Al explorar los matices de este producto, es posible disfrutar de sus bondades de manera consciente y responsable, contribuyendo así a la expansión de la cultura del hachís cbd.
Hachís dry
El hachís tamizado en seco es un método de extracción que consiste en frotar el material vegetal con un tamiz para eliminar la resina de las flores, con el fin de consumirla posteriormente. Este proceso se puede realizar con una caja de cribas, un agitador de hachís, un centrifugador de hachís o incluso con un molinillo. Dependiendo del tamaño de las micras, el hachís saldrá más fino y con propiedades de mayor calidad.
Charas
Si eres un entusiasta del cannabis, seguramente habrás oído hablar del hachís, pero ¿qué sabes sobre las misteriosas charas? Estos extractos de cannabis, similares al hachís, tienen sus propias raíces en las regiones fascinantes de Asia, específicamente en India, Pakistán y Nepal. Vamos a sumergirnos en el mundo de las charas, explorando su origen y el proceso de producción, revelando la magia que las distingue de otros extractos de cannabis.
Tras las Huellas de las Charas
Las charas son, en esencia, una obra maestra hecha a mano con plantas de cannabis frescas y vivas. A diferencia del hachís, que se elabora con material vegetal seco, las charas capturan la esencia cruda y potente de la planta en todo su esplendor.
El Secreto de los Tricomas
El corazón de las charas reside en los tricomas, pequeñas glándulas cristalinas y pegajosas que se desarrollan en las flores del cannabis, así como en menor medida en tallos y hojas. Estas minúsculas fábricas de cannabinoides son la clave para obtener un concentrado excepcionalmente puro.
En el vasto universo del cannabis, las charas destacan como una joya oculta. Originarias de las tierras encantadoras de Asia, estas creaciones a mano capturan la esencia fresca y viva de la planta, ofreciendo a los conocedores una experiencia única. Así que, la próxima vez que explores el mundo del cannabis, no olvides darle una oportunidad a las encantadoras charas.